30 de diciembre de 2008

Hoy es 30 de diciembre y seguimos en el hospital.
Guillermo está mejor del virus del estómago, tenia un rotavirus, y ahora tiene dificultad respiratoria, necesita oxigeno para dormir.
Ya no miro el día que es, solo pienso en que en unos días nos den el alta para poder estar en casa junto a mi otro hijo y mi marido unos días, antes de tener que ingresar para una nueva dosis de quimio.
Al año que se va le digo que se vaya ¡yaaa! Me ha cambiado toda mi vida, hay un antes y un después desde el 11 de septiembre de 2.008
al año que entra le pido salud, que palabra tan importante cuando no la tienes, para los míos, en especial para que si Dios quiere sea el año de la curación de Guillermo y que podamos retomar un poco nuestras vidas aunque ya nunca volverá a ser como antes.
Pero bueno mi hijo pronto, el 13 de enero cumplirá un añito, que hace unos meses no creímos ni que pudiera verle vivo mucho tiempo.
Ojalá Dios nos oiga, oiga nuestras peticiones, nuestros ruegos y atienda favorablemente el favor que le pido.